viernes, 18 de noviembre de 2011

Un día cualquiera

Hay días en que simplemente no estás, prefieres hacer la ruta sólo, a tu aire, sin tener que explicar tus tonterías a nadie, sin ganas de hablar. Hoy es uno de esos días, de esos en que no estás para nadie. Uno de eso días que sales sin cuentakilometros, sin pulsómetro, sin nada que te diga como estas, dando pedales para ir a donde te lleve tu mente, ausente y con la mirada fija en un punto infinito, pasando una y otra vez por el mismo punto, las piernas avanzan hacia atrás, reflexión, seguimos...

Vuelves a mirar a la misma piedra, al mismo árbol, aquel que siempre encuentras en cada esquina, tan grande, debe tener unos cuantos cientos de años, te apoyas, decides, hablamos un rato, descanso obligado. Sus ramas se agitan advirtiendo del peligro, debemos seguir, luego nos vemos.

Que importante tener a alguien a tu lado que siempre te apoye, que te haga pensar y recapacitar pero hagas lo que hagas te diga, "haz siempre lo que te diga tu corazón, harás lo correcto", nunca falla, pronto todo llegará. Lee entre líneas, sabes de que hablo.

Ahora sueño, cansancio, no se si es pronto o tarde pero mañana habrá tiempo para más...

Nos vemos

2 comentarios:

Karracolina dijo...

siempre mañana habrá más...

Asier dijo...

Siempre habrá ganas para más...

Nos vemos