sábado, 22 de agosto de 2015

Pequeño

Al final te das cuenta que lo pequeño es más importante. Las conversaciones a las 3 de la mañana, las sonrisas espontáneas, las fotos desastrosas que te hacen reír a carcajadas, los poemas de diez palabras que te sacan una lágrima. Los libros que nadie más conoce y se vuelven tus favoritos, una flor que te pones en el cabello, un café que te tomas sólo... eso es lo que verdaderamente vale la pena, las cosas diminutas que causan emociones gigantescas.

Recuerdo cuando empezaron los amaneceres, sigamos usando las pequeñas llaves que abres las puertas que hay en tu vida, sigamos pedaleando por pequeños caminos que nos llevan a lugares increibles.

Nos vemos