miércoles, 27 de octubre de 2010

Silencio

No acaba de terminar la temporada y ya empezamos la siguiente, con nuevos proyectos, nuevas ideas, cosas que hacer, empezamos a movernos, soy un hombre inquieto y mi cabeza no para, cosas que se irán aclarando en los siguientes días y otras dudas que se irán aclarando más adelante, no hay prisa... Tengo pájaros en la cabeza que sueñan y me hablan y que no se vayan nunca, el día que se vayan yo me iré con ellos.

Llega noviembre, el cambio de hora, se acerca la noche, el frío hace mella. Hora de coger las luces, abrigarse y salir por la noche, en silencio. Ese silencio que tanto me acompaña en cada salida, la noche mágica con la luna observando, tu y yo, somos cuatro en esta nueva salida a ningún sitio. Salimos, soñamos y volvemos a despertar, abrimos la puerta y el calor del hogar nos embarga...

Mañana tocará volver a salir, volver a soñar, si estás en silencio te dejo que me acompañes... ¿te animas?

Nos vemos

viernes, 15 de octubre de 2010

Hoy

Hoy es un día como otro cualquiera, mucha gente me llama y me escribe, algunos son gente del día a día y otros son gente con lo que sólo hablo en días puntuales. Me alegra recibir algún mensaje o llamada de esa persona que hace tiempo que no ves. Algunos te dan el pésame, te haces mayor, te haces viejo, yo me siento igual, bueno no, me siento mas joven que nunca, con más vitalidad, después del intenso fin de semana vivido en Manteigas y de varias cosas habladas. Porque la palabra que uno da vale.

Hace años, cuando todavía no había muchas de las cosas que tenemos en la actualidad, los acuerdos no hacía falta firmarlos, la palabra valía más que cualquier otra cosa, antes la gente era de palabra, si decías lago lo cumplías. Según pasaba el tiempo la desconfianza, envidias y el resto de valores que reinan hoy en día hicieron que la palabra fuera perdiendo valor hasta llegar a no valer nada. Las palabras se las lleva el viento de aquí para allá y a nadie ya le importan, nadie hace caso a lo que dices.


Yo, como todavía sigo siendo un poco raro, pues eso, todavía creo en ti, en lo que me dices, en lo que sale de tu boca, en lo que dijiste el otro día y en la promesa que nos hicimos.

Hoy, mi cumpleaños, mañana auto-regalo una rutita en bici y cuatro palabras...

Nos vemos

lunes, 4 de octubre de 2010

Manteigas


Manteigas 4ª y última etapa compartiendo miradas y sonrisas, lágrimas y mas sonrisas, un desayuno, una cena, una cama, un sueño, una despedida y unas palabras, un hasta pronto y un hasta la vista.

Lo que en marzo empezó pues no se muy bien como, hoy acaba de la manera más feliz de todas y es con lágrimas en los ojos. Y es que no hay nada mas bonito en este mundo que llorar por algo bonito, por ser feliz, porque cuando se llora por algo es porque te llena. Porque si, porque yo también me fui con una lágrima de allí. Y se acabó y lo más importante es que acabamos este año siendo mas humanos. Seguimos en la nube que nos llevó a hacer este camino y nos volvió a traer de vuelta a casa y que nos volverá a llevar el año que viene por esas tierras sólo por la gente que esta en ellas.


Sólo hay una diferencia entre la vida y la muerte y son los latidos de tu corazón, ti tu corazón late, si sientes, si te alegras cuando tus amigos se alegran, si lloras con ellos, si aprecias todas esas cosas que no valen dinero entonces esta vivo, sino estas muerto. La gente que me conoce sabe de que hablo.

Yo tengo suerte, mi corazón late, bombea sangre a mis piernas que siguen dando pedales allá por donde vás.

En la revista marathonbiker teneis un extenso reportaje sobre las 4 pruebas.

La última línea de hoy de agradecimiento a Paulo y a todo su equipo que ha hecho posible este campeonato que nos ha permitido compartir muchas más cosas que una bicicleta y dar cuatro pedales.
 






Nos vemos